Días de todo

Hay días de todo, pero tú te acostumbras a que cada mañana te invadan miles de mensajes positivos en las redes sociales y resulta que todas las mañanas no son iguales, que la vida a veces es...complicada.  Hoy, te olvidas de ponerte la careta de todos los días, algunos días no quieres o simplemente ni puedes, porque algunos días la vida es como es, como debe ser a veces, complicada. Si te caes y te desmontas tus motivos tienes, si te caes y no consigues elevarte pide ayuda, tu puedes. A menudo crees que puedes con todo, tal vez crees que eres perfecto que siempre estarás contento, que siempre estarás a la altura de las circunstancias, pero de repente descubres que no es así, que tu también eres de carne y hueso y estás relleno de miles de emociones que en ocasiones están tan revueltas que hasta te pesan.

La vida, eso que va pasando cada día, por delante de ti y eso de lo que a veces te olvidas pensando en que fue de ayer y que será de mañana. A veces por más que lo intentes tu mente no para y se dispara y entra en un caos increíble del que sólo tu puedes sacarla.

Que sí, "que la vida es más bonita si la miras sonriendo",  cierto, pero a veces hay que mirarla con lágrimas en los ojos, porque es entonces cuando al fin, consigues darte cuenta de algo que te sienta como una "ostia", que te abre los ojos y te indica que algo no va bien, algo de lo que ahora debes ocuparte.

Y ahora qué

Pensabas que de repente todos tus sueños se harían realidad, creías que sin mover un solo dedo todo sería especial, tenías tantas ganas de vivir y disfrutar y aún las sigues teniendo,  pero ahora sabes que la vida no es tan fácil y que para conseguir llegar a ese lugar algo hay que hacer, queda mucho por recorrer.
Nada es blanco, nada es negro, debes unir los dos colores y crear nuevos tonos, los que quieras, los que te inspiren, pero para, observa y relaja tu alma. Disfruta el momento, pero aún queda mañana.

Y ahora qué, te levantas y empiezas de nuevo, simplemente recompones y compones un ritmo nuevo.

Hoy aquí

Hoy aquí, escribes el libro de tu vida sin saber su fin. Creas y te recreas en sus páginas, sus letras, sus acentos y sus comas, todos y cada uno de los detalles importan. De todos y de cada uno de sus momentos brotan signos de alegría, de tristeza, de dolor y calma. Entiendes, que la vida es simplemente así, que nada es eterno, que llegar hasta aquí no fue fácil pero mantenerse menos, que todo tiene sentido si tu se lo das, que los demás te rodean y forman parte de ti, pero sin ti este barco se hunde y no hay rumbo que valga, ni destino final. Te importa poco el destino, pero sí tomar un rumbo calmado, divertido, alocado...La vida al final será eso, el amor, la ilusión, reír, cantar, viajar por tu mundo, el tuyo y el de todos.
La vida, para cada cual, la suya, su manera de vivir, de sentir, para cada cual su vida, única. Todos tus días son únicamente tuyos.

Esos momentos

Esos momentos, en los que sientes que no puedes con todo, en los que de repente caes sin freno, momentos que a veces se hacen presentes en tu vida. Quieres poder, quieres creer, quieres, quieres...y no puedes querer más. Poder con todo es complicado, mira a tu alrededor, por algo vivimos rodeados/as de personas.

Coge aire, respira profundamente y con cada exhalación que todas y cada una de tus preocupaciones se vayan lejos, muy lejos, donde nunca jamás encuentren el camino de vuelta hacía a ti, hacia tu interior, hacia tu mente, que sin duda, anhela sentir esa paz que ya conoce y disfruta intensamente.

Reiniciando

Lo intentas, una y mil veces, vives la vida como a ti te apetece. Escuchas voces, las ignoras,  porque prefieres vivir un momento de ilusión que una vida gris, apagada y para ti sin sentido.

Miras al mundo, abres tu corazón, una y mil veces más,  las que hagan falta, ¿por qué no? ¿ por miedo?
Querido miedo, toma mi mano, seamos amigos, vamos a vivir y a disfrutar cada segundo de esta, mi vida.

Te reinicias, una y mil veces, todas las que desees, hoy decides estar viva.

                                  “Todas las personas mayores fueron al principio niños. (Aunque pocas de ellas lo recuerdan.)” 

Antoine de Saint-Exupéry

A veces...

A veces despiertas sin ganas de hablar, ni de reír, ni tan sólo llorar. Hay días que la vida parece pararse, que nada tiene sentido si tu no se lo das, que lo que ayer te hacía feliz, hoy no es importante. Esos días existen y forman parte de la vida, quedarte anclado/a en uno de ellos depende de ti. Si te acomodas, ahí te quedas.

A veces la vida, te pone delante situaciones de apariencia imposible, tan imposibles, que no sabes como abordarlas. Me pregunto, porqué no tenemos un manual de instrucciones sobre como vivir nuestra vida, pero me alegro a la vez de que así sea, de tenerlo, todos seríamos iguales, se perdería esa esencia, la de cada uno, la que nos hace únicos y especiales, se perderían las ganas de vivir, la ilusión, la motivación de cada cual. ¿Qué es la vida sin ilusión, sin caminos por descubrir, sin nuevas historias que luego podrás contar, sin momentos inesperados, sin personas desconocidas a quién encontrar?
No sé a ti pero a mí, me apetece perderme y descubrirme de nuevo, diferente, pero siendo yo misma.
Mi esencia, esa que nunca se pierde, esa que pase lo que pase me acompaña. 

En este momento

Hay momentos en la vida en los que casi sin darte cuenta, te encuentras en un estado de calma, de paz. Me encanta disfrutar de esos momentos, empaparme de esa buena energía, sentir como todo mi ser se relaja. Relajarse, algo tan necesario pero a veces tan poco probable.

Ahora, en este momento, respira, sonríe y piensa, que al fin y al cabo la vida no es más que tu obra de teatro, crea tu propio escenario, elige bien a sus personajes, disfruta siempre que puedas y sobretodo, no olvides seguir viviendo.

Ser "mami"

Nunca he hablado sobre mi maternidad, pero para mi es una de las cosas más importantes de mi vida. Hace seis años fui madre y desde entonces no he parado de aprender, de ilusionarme, de enfadarme algunas veces, de no dormir algunas noches, aunque en mi caso debo decir que pocas, de cuestionar una y otra vez mis decisiones, de sentirme culpable...todas estas cosas que implican ser madre. Muchas veces escucho a madres cuestionarse si lo hacen bien o mal y siempre opino lo mismo, lo haces lo mejor que puedes y sabes, pero hazlo con amor, ganas y ilusión. Al final todo es más sencillo de lo que parece, aunque agotador, quién diga que educar no agota que por favor me explique cuál es su secreto.

Día tras día estamos al pie del cañón, las madres y los padres somos la bomba, tenemos una energía inagotable y es de admirar el esfuerzo que hacemos por seguir adelante, de vez en cuando hay que premiarse, hay que hacerlo.

Ser madre es una de las cosas más maravillosas que han pasado en mi vida y al final del día, cuando mi cuerpo y mi mente se rinden, siempre encuentro esa sonrisa sincera que me hace olvidar que el tiempo vuela.

Descubrí

Un día descubrí que decir lo que siento simplemente libera, que expresar sentimientos con palabras me hace ser yo misma, me respeto.
Descubrí que si no expresas lo que quieres hacer, si no, que lo haces, la vida se disfruta más y se aprecian los detalles, que si pongo mi mente en el momento presente lo demás no importa, porque mañana, ya se verá y cuando esté ahí en ese momento será una primera vez, sin esperar nada de un futuro todavía inexistente.

Un día descubrí que vivir es más fácil, que se puede soñar grande, que se puede hacer aquello que te hace sentir así, viv@. Empecé a respetarme, a seguir mis propios pasos, a romper mis creencias, a escuchar mis miedos pero conversar con ellos, que ellos simplemente acompañan y avisan de algo que puede, o no pasar.

Desmontando

Y si todo aquello qué hemos aprendido no es cierto, o no tiene porqué serlo. Desmontando la vida, desmontando las creencias, esas que son tan limitantes. Resulta que cada uno puede vivir a su manera. Conseguirlo cuesta un esfuerzo, pero tal vez vale la pena. Vivimos en un mundo lleno de ojos que juzgan sin pensar más allá de lo que ven.
Las personas somos más que un cuerpo, tenemos historia, tenemos momentos que han marcado nuestra trayectoria. Cada cual a su manera construye su camino, entonces, cada cual que sea responsable de vivir la vida a su manera.
No existe mayor libertad que la de poder hacer aquello que te hace sentir vivo/a, aquello que haces desde el corazón, la mente y sobretodo respetándote y respetando al resto del mundo.

No sé si son los años, las ganas de vivir o la perseverancia de día tras día,  pero ahora, mi vida, es sólo mía.

Se puede

Ayer una vez más, comprobé con la gran capacidad que nacemos  para disfrutar de todos los bonitos detalles que la vida nos pone delante.  Normalmente, con el paso de los años,  vamos perdiendo esa  capacidad, muchos/as que forman parte de nuestro entorno influyen para que así sea.  Simplemente hay que querer recuperarla y de nuevo te ilusionas.

Gracias pequeño gran maestro, porque siempre que camino a tu lado consigo volver a ver todos y cada uno de los detalles,  juntos disfrutamos de esa gran habilidad para sumergirnos en nuestro mundo de emociones. 

Días raros

De esos días que sin darte cuenta pasan y te preguntas,  ¿hoy he perdido el tiempo? Nunca se pierde el tiempo, piénsalo bien, siempre hay algo que anotar, algo que guardar en tu recuerdo. Hay días raros, o te pueden parecer raros, porque no haces nada en concreto, porque todo es abstracto, pero el más simple detalle es importante en la historia de tu vida. Aunque hoy no lo creas, todo es importante.
Días raros, porque tu eres raro/a, porque al fin y al cabo eres diferente. 

" Es raro no ser raro" John Lennon

Tengo que volar

Ayer fue un día triste, porque a veces los días son tristes, pero no todo en él lo fue, hubieron risas, hubieron abrazos, conversaciones profundas, que salen del corazón y de los años de amistad, que aunque a veces somos todos difíciles de ver, existe la calidad humana.

Los días tristes son importantes,  ayudan a pensar, a darte cuenta de que la vida es más simple, que a veces hay que parar, que las paradas cada vez son más cortas, porque ya te pasaste a la acción y vivir es eso. 

Como dice una canción de los delincuentes y Bebe...

hay que ser valiente y despertar

y vivir, como vive la gente

hay que ser valiente amigo

yo tengo que volar!!

Y quien vuela, se volverá estrellar,  pero que genial es estrellarse y tener una y mil historias que contar. 

Algo nuevo

¿Has probado alguna vez a hacer algo nuevo aunque parezca una locura? Si no lo has hecho, debes hacerlo. Hoy es un gran día para decidir hacer algo que te apetezca, que te motive y que te haga feliz. Mañana ya comprobarás si lo haces bien o no, pero eso ahora ¿ qué importa?  lo importante es la sensación de felicidad que te invade en este momento, tras tomar esa decisión que para ti, hoy es importante.

Ahora

Ahora, la vida es más sencilla. Para vivir lo único que hace falta es ser un@ mism@, decir siempre lo que se siente, respetándote y respetando.
Ahora resulta que la vida es simple, que lo importante es amarse, confíar en un@ mism@ y hacer todo aquello que alimente tu autoestima.

Mi conclusión, respeto y sobretodo esencia,  estar presente ahora, en este momento y lo demás pierde importancia.

Esto es sólo el principio.