Hoy, mientras escuchaba un programa de radio en el que hablaban sobre las relaciones que absorben energía, sobre los famosos vampiros emocionales, que no muerden pero su daño es a veces mayor que el de un mordisco, me daba cuenta de que estamos rodeados de ellos y de que todos/as, en alguna o otra ocasión, hemos sido vampiros emocionales.
A nadie le gusta reconocer que ha hecho daño, que en alguna ocasión ha absorbido la energía positiva de otra persona, en cambio, nos encanta decir que hemos salvado a alguien, socialmente está mejor visto, pero sea como sea, unos y otros nos alimentamos enérgicamente.
Las claves para no dejarse morder por esos vampiros emocionales: poner límites, desarrollar la empatía... estas son algunas, pero existen muchas más. Lo importante es detectarlos, saber que son personas que cuando se van te dejan agotados, personas capaces de desmontar toda tu realidad feliz.
Si te paras a pensarlo incluso da miedo, imagínate a alguien que chupa hasta la última gota de tu sangre y te deja sin fuerza, sin nada dentro. Por supuesto, puedes impedirlo, tu eres responsable de no seguir ese patrón de relación en la que, tanto tu como el vampiro obtenéis beneficios, es un intercambio, tu me das energía y yo te hago sentir bien, porque te necesito, porque me salvas de lo desgraciado/a que soy. Uf! que relaciones tan poco saludables y destructivas.
Si te identificas y te encuentras en alguno de estos roles, a qué esperas, cambia tu conducta, debes indagar en tu interior, conocerte mucho mejor para poder saber el motivo por el cual te comportas así, una vez lo sepas podrás ponerle remedio, no es tan difícil, sólo requiere de ganas y tiempo.
Cuando consigas hacer esto quizás pierdas algunas relaciones de amistad, e incluso de pareja, pero como siempre piensa en positivo, esas relaciones no te beneficiaban, esas relaciones te agotaban y tu energía es muy necesaria para vivir la vida, para aconseguir tus objetivos, tus sueños, para amar a aquellos que verdaderamente te aman, aquellos que sólo quieren verte feliz, a los que les alegran tus logros, les alegra tu alegría, tus ilusiones y por supuesto nunca te piden nada a cambio, se conforman con verte simplemente feliz :D
Es bueno que las vidas tengan varios círculos, pero la mía, mi vida, sólo ha dado la vuelta una vez y no del todo...
miércoles, 30 de octubre de 2013
martes, 29 de octubre de 2013
¿Llegó el otoño?
Llueve, hace un día gris, extraño después de haber pasado ayer un gran
día de sol y calor.
Es gracioso escuchar a los abuelos/as hablar del tiempo, siempre hablan de él, de como está cambiando, de lo extraño que es vestir en manga corta en el mes de octubre, extraño o no, a mi me encanta.
Hay que reconocer que todas las estaciones tienen su encanto, la caída de las hojas en otoño hace de los paisajes de montaña algo espectacular, pero siempre se ha dicho y es real, que el sol da vida, que el sol te llena de energía, es cierto que a veces agota, pero la luz solar permite hacer una y mil cosas.
Este verano disfruté de un maravilloso tiempo en un país nórdico, un tiempo inimaginable, unos paisajes increíbles a la luz del sol, fueron pocos los días nublados, pero debo reconocer que incluso así, los paisajes eran espectaculares.
Ahora, allí deben quedar pocas horas de luz, así que aunque hoy esté nublado...
Es gracioso escuchar a los abuelos/as hablar del tiempo, siempre hablan de él, de como está cambiando, de lo extraño que es vestir en manga corta en el mes de octubre, extraño o no, a mi me encanta.
Hay que reconocer que todas las estaciones tienen su encanto, la caída de las hojas en otoño hace de los paisajes de montaña algo espectacular, pero siempre se ha dicho y es real, que el sol da vida, que el sol te llena de energía, es cierto que a veces agota, pero la luz solar permite hacer una y mil cosas.
Este verano disfruté de un maravilloso tiempo en un país nórdico, un tiempo inimaginable, unos paisajes increíbles a la luz del sol, fueron pocos los días nublados, pero debo reconocer que incluso así, los paisajes eran espectaculares.
Ahora, allí deben quedar pocas horas de luz, así que aunque hoy esté nublado...
¡Que suerte tenemos de poder
disfrutar del día!
lunes, 28 de octubre de 2013
Lunes, la semana empieza bien
Te despiertas, levantas, abres los ojos y te das cuenta del
maravilloso día que te espera por delante. ¿Habéis empezado ya vuestro cuaderno
positivo? Si lo leéis cada mañana el día empezará con buen pie.
Todos los días de la semana pueden ser duros, pero el lunes
es el día por excelencia, lo sea o no, cada lunes nos bombardean con esa
etiqueta; quizás otra manera de verlo sería despertar lleno de alegría y
vitalidad, pensando en lo gratificante que ha sido el fin de semana, o como a
veces he leído, pensar en la frase: si no existieran los lunes no llegarían los
viernes.
Sea como sea, la semana tiene siete días y normalmente se
descansan dos, algunos sólo uno y otros, ocasionalmente, ninguno. Sea como sea lo
ideal es saber valorar los buenos momentos.Muchos con el paso de los años, se dan cuenta de que al fin y al cabo el trabajo nos puede gustar más o menos, pero es trabajo.
Algunos han elegido bien y disfrutan con lo que hacen, otros
no tanto...
!Ahí está el fin
de semana para hacerlo!
jueves, 24 de octubre de 2013
Días felices
No sé por qué extraño fenómeno, pero hay días en los que te sientes tremendamente feliz, días a los que he bautizado, simplemente, como días felices.
¿No os pasa? hay días en que despiertas y todo parece maravilloso, de color de rosa sería para las/os enamoradas/os del rosa, aunque yo prefiero decir que el color es verde.
Caminas y todo lo que ves te encanta, todo capta tu atención, ves sonrisas en la gente, ese día ves lo bonito que es el mundo y si ves algo que no te gusta, simplemente sientes la emoción que te transmite y la dejas escapar, como si fueras de nuevo un niño/a. Que sabios/as que son los niños/as!
Creo, es mi hipótesis, que esos días estás más receptivo/a con los cinco sentidos puestos en todo, sin olvidarte de ninguno, ese día disfrutas de lo que te gusta, del olor de las flores del parque, del sabor del Cola Cao de la mañana, de la música que suena en la radio...sin duda ese día es un día feliz. Feliz porque te sientes plena/o, porque te apetece sonreír, estar con las personas a las que amas, disfrutar de tu tiempo libre y además ese día estás tremendamente relajado/a.
¿No sería maravilloso tener muchos días felizmente verdes? quizás la clave está en ti, si miras alrededor y ves todo lo que tienes y disfrutas de ello, te olvidarás de aquello que no está y dejarás de pensar en el mañana disfrutando del presente.
La clave sin duda es relajarte y disfrutar.
¿No os pasa? hay días en que despiertas y todo parece maravilloso, de color de rosa sería para las/os enamoradas/os del rosa, aunque yo prefiero decir que el color es verde.
Caminas y todo lo que ves te encanta, todo capta tu atención, ves sonrisas en la gente, ese día ves lo bonito que es el mundo y si ves algo que no te gusta, simplemente sientes la emoción que te transmite y la dejas escapar, como si fueras de nuevo un niño/a. Que sabios/as que son los niños/as!
Creo, es mi hipótesis, que esos días estás más receptivo/a con los cinco sentidos puestos en todo, sin olvidarte de ninguno, ese día disfrutas de lo que te gusta, del olor de las flores del parque, del sabor del Cola Cao de la mañana, de la música que suena en la radio...sin duda ese día es un día feliz. Feliz porque te sientes plena/o, porque te apetece sonreír, estar con las personas a las que amas, disfrutar de tu tiempo libre y además ese día estás tremendamente relajado/a.
¿No sería maravilloso tener muchos días felizmente verdes? quizás la clave está en ti, si miras alrededor y ves todo lo que tienes y disfrutas de ello, te olvidarás de aquello que no está y dejarás de pensar en el mañana disfrutando del presente.
La clave sin duda es relajarte y disfrutar.
Os deseo muchos días intensamente verdes ;D
miércoles, 23 de octubre de 2013
Párate de vez en cuando
Que difícil es parar, que complicado, algo que parece tan sencillo es a veces imposible.
Recuerdo cuando trabajaba en Barcelona y cada mañana cogía el metro, a veces me sorprendía diciéndome a mi misma: ¿por qué corres, vas bien de tiempo?; que porqué corría, porque todo el mundo a mi alrededor lo hacía.
Nunca he sido muy puntual, defecto que intento corregir pero por más que lo intento no consigo hacerlo, incluso en ocasiones me espero al último momento para salir de casa, como si algo dentro de mi me dijera, venga que así ahora corremos... Estoy segura de que muchos/as os sentís identificados y que muchos/as habéis intentado corregirlo en alguna que otra ocasión.
A veces corremos para no pensar, a veces corremos para no ver, o simplemente porque nos gusta esa sensación, porque así nos sentimos vivos/as.
Un pequeño y a la vez gran consejo: párate de vez en cuando, respira, piensa en como te sientes, piensa en como está tu cuerpo, que se mueve por dentro. Si lo haces puedes llegar a descubrir tantas cosas, lo primero y más evidente, por ejemplo, el color de las flores del parque por el que pasas todas las mañanas.
Otro ejemplo más de que nos perdemos detalles, y igual que detalles nos perdemos momentos.
Todo esto me recuerda a un capítulo del Alquimista (Paulo Coelho), libro que me regalaron en el momento preciso, cosas que sin saber cómo ni porqué, pasan a veces y son perfectas. Pues bien, en el capítulo se habla de la importancia de observar las maravillas del mundo, sin olvidar lo esencial, pero por supuesto disfrutar de todo lo que nos rodea. Sin duda, otro más de los secretos de la felicidad!
Recuerdo cuando trabajaba en Barcelona y cada mañana cogía el metro, a veces me sorprendía diciéndome a mi misma: ¿por qué corres, vas bien de tiempo?; que porqué corría, porque todo el mundo a mi alrededor lo hacía.
Nunca he sido muy puntual, defecto que intento corregir pero por más que lo intento no consigo hacerlo, incluso en ocasiones me espero al último momento para salir de casa, como si algo dentro de mi me dijera, venga que así ahora corremos... Estoy segura de que muchos/as os sentís identificados y que muchos/as habéis intentado corregirlo en alguna que otra ocasión.
A veces corremos para no pensar, a veces corremos para no ver, o simplemente porque nos gusta esa sensación, porque así nos sentimos vivos/as.
Un pequeño y a la vez gran consejo: párate de vez en cuando, respira, piensa en como te sientes, piensa en como está tu cuerpo, que se mueve por dentro. Si lo haces puedes llegar a descubrir tantas cosas, lo primero y más evidente, por ejemplo, el color de las flores del parque por el que pasas todas las mañanas.
Otro ejemplo más de que nos perdemos detalles, y igual que detalles nos perdemos momentos.
Todo esto me recuerda a un capítulo del Alquimista (Paulo Coelho), libro que me regalaron en el momento preciso, cosas que sin saber cómo ni porqué, pasan a veces y son perfectas. Pues bien, en el capítulo se habla de la importancia de observar las maravillas del mundo, sin olvidar lo esencial, pero por supuesto disfrutar de todo lo que nos rodea. Sin duda, otro más de los secretos de la felicidad!
martes, 22 de octubre de 2013
Recomendaciones en positivo
Creo que en alguna ocasión ya os he hablado de esto, algo que escuché en una entrevista a Elsa Punset, y como dijo uno de los formadores de las jornadas de comunicación emocional, sé que si lo ha dicho ella resultará más atractivo. De todas formas ahora os lo recomiendo yo y por supuesto pongo mi granito de arena, granito de arena que aporto tras mi experiencia, porque si algo bueno tienen los consejos, es que cuando los aplicamos tenemos la gran oportunidad de experimentarlos y aportar nuevas ideas, basándonos por supuesto en nuestra percepción y experiencia.
Pues bien, sin más os recomiendo que, primero os compréis un cuaderno, yo lo he titulado mi cuaderno positivo y en él escribo todo aquello bueno que me pasa durante el día, intento por lo menos escribir cinco cosas diariamente; también lo uso para escribir observaciones sobre los demás y sobre mi misma, cosas de mi que voy descubriendo poco a poco, porque sí, a pesar de mis treinta y seis años, todavía no me conozco del todo.
Mi cuaderno positivo se está quedando sin páginas en blanco, no pensé que lo llenaría tan rápido.
Hacer la prueba y al final del día leer todo aquello que habéis escrito, os iréis a dormir con una buena sensación y a la mañana siguiente os despertaréis pensando que sólo por esas cosas merece la pena disfrutar de otro día. Es imposible saber lo que nos depara cada uno de los días de nuestra vida, pero si te despiertas positivamente, incluso el sonido de tu despertador sonará a una dulce melodía, incluso disfrutarás de una gran o pequeña conversación al llevar a tus hijos a la escuela, simplemente te sentirás más alegre, positivo/a y todo lo que te depare el día pasará por un filtro diferente, no por el oscuro filtro de la negatividad, que en muchas ocasiones se respira en el ambiente. Si consigues huir de esa negatividad y no dejarte llevar por las ansías de correr y vivir deprisa, estoy segura de que conseguirás tener más momentos de felicidad, porque no nos engañemos la felicidad plena no existe, pero si existen momentos en los que te sientes la persona más feliz del mundo y esos momentos son suficientes para aportar energía, ilusión y ganas de seguir disfrutando de la vida!
Pues bien, sin más os recomiendo que, primero os compréis un cuaderno, yo lo he titulado mi cuaderno positivo y en él escribo todo aquello bueno que me pasa durante el día, intento por lo menos escribir cinco cosas diariamente; también lo uso para escribir observaciones sobre los demás y sobre mi misma, cosas de mi que voy descubriendo poco a poco, porque sí, a pesar de mis treinta y seis años, todavía no me conozco del todo.
Mi cuaderno positivo se está quedando sin páginas en blanco, no pensé que lo llenaría tan rápido.
Hacer la prueba y al final del día leer todo aquello que habéis escrito, os iréis a dormir con una buena sensación y a la mañana siguiente os despertaréis pensando que sólo por esas cosas merece la pena disfrutar de otro día. Es imposible saber lo que nos depara cada uno de los días de nuestra vida, pero si te despiertas positivamente, incluso el sonido de tu despertador sonará a una dulce melodía, incluso disfrutarás de una gran o pequeña conversación al llevar a tus hijos a la escuela, simplemente te sentirás más alegre, positivo/a y todo lo que te depare el día pasará por un filtro diferente, no por el oscuro filtro de la negatividad, que en muchas ocasiones se respira en el ambiente. Si consigues huir de esa negatividad y no dejarte llevar por las ansías de correr y vivir deprisa, estoy segura de que conseguirás tener más momentos de felicidad, porque no nos engañemos la felicidad plena no existe, pero si existen momentos en los que te sientes la persona más feliz del mundo y esos momentos son suficientes para aportar energía, ilusión y ganas de seguir disfrutando de la vida!
El valor de los pequeños momentos
Detalles, detalles que se nos pasan, porque no vivimos el presente, porque siempre pensamos en mañana, en el mes o el año que viene. Con lo sencillo que es vivir el momento, pero resulta que a nosotros los humanos nos resulta más sencillo olvidar el presente y vivir anclados en el pasado o proyectar nuestro futuro.
Últimamente están muy de moda técnicas como el mindfulness (aquí y ahora), un tipo de meditación cuyo propósito es enseñarnos a estar presentes en lo que estamos viviendo en un justo momento. En la técnica se hacen prácticas como por ejemplo la alimentación, que consiste en disfrutar, saborear y pensar como ha llegado un alimento a nuestras manos, valorar incluso el trabajo realizado para poder disfrutar de ese alimento; otro ejemplo sería el caminar, sentir nuestros pasos al pisar el suelo e incluso ser capaces de acelerar o frenar el ritmo, algo que para mi al practicarlo fue complicado. Que manía tenemos de ir corriendo siempre, otro mal hábito que hemos adquirido, hábitos que al fin y al cabo sólo nos conducen a sufrir estrés y algun que otro problemilla de salud.
Esta y otro tipo de técnicas, son técnicas que admiro y que me parecen fantásticas, son una manera de reeducar a la especie humana, una especie que ha perdido valores simples, pero sin duda muy importantes.
.
Últimamente están muy de moda técnicas como el mindfulness (aquí y ahora), un tipo de meditación cuyo propósito es enseñarnos a estar presentes en lo que estamos viviendo en un justo momento. En la técnica se hacen prácticas como por ejemplo la alimentación, que consiste en disfrutar, saborear y pensar como ha llegado un alimento a nuestras manos, valorar incluso el trabajo realizado para poder disfrutar de ese alimento; otro ejemplo sería el caminar, sentir nuestros pasos al pisar el suelo e incluso ser capaces de acelerar o frenar el ritmo, algo que para mi al practicarlo fue complicado. Que manía tenemos de ir corriendo siempre, otro mal hábito que hemos adquirido, hábitos que al fin y al cabo sólo nos conducen a sufrir estrés y algun que otro problemilla de salud.
Esta y otro tipo de técnicas, son técnicas que admiro y que me parecen fantásticas, son una manera de reeducar a la especie humana, una especie que ha perdido valores simples, pero sin duda muy importantes.
lunes, 14 de octubre de 2013
Trabajo, felicidad y otras cosas
Últimamente no paro de escuchar en la radio"Don't worry be happy", antigua canción, cuyo mensaje es bastante claro.
Quizás la primera vez que la escuché el mensaje me pareció fácil de conseguir, quizás fue hace unos cuantos años...Ahora lo escucho y pienso, sí es cierto, no te preocupes más de la cuenta por las cosas que te pasan y que pasan a tu alrededor, pero seamos sinceros, la cosa es preocupante.
Para combatir todo esto, no paran de bombardearnos con mensajes tipo: monta tu propia empresa, saca el genio que hay en ti, etc. de repente parece que todos debemos ser emprendedores, creativos...vivimos en la era de la creatividad y el emprendimiento y es que en algo debemos ocupar nuestras mentes pensantes y creativas, por supuesto.
Debo reconocer que el coaching me enganchó bastante al principio,lo sigo y lo respeto, pero está claro que hay mucho intrusismo y muchos/as aprovechan ahora esta época para hacerte creer que te van a dar la clave del éxito, cuando en realidad esa clave la tienes tu.
¿Cuál es el problema? que no sabemos y no queremos mirar en nuestro interior, que hemos vivido durante mucho tiempo a remolque de la sociedad del consumo, la sociedad capitalista y comprando un jersey y unos zapatos nos sentíamos bien, y de nuevo lunes y de vuelta al trabajo, sin darle en muchas ocasiones importancia a aquello que estábamos haciendo; señores/as, el trabajo ocupa la mayor parte de nuestro día a día, si no disfrutamos con él o almenos de él...¿qué sentido tiene la vida?
Y ¿qué sentido tiene no preocuparnos en cómo estamos por dentro? si estamos bien por dentro quizás nos conformemos con un simple par de zapatos, quizás con ese par nos sintamos la persona más feliz del mundo.
Hace unos días contacté con un centro cívico ofreciendo actividades y talleres para motivar, para ayudar a personas a mejorar su autoestima, etc. mi sorpresa fue que la responsable del centro me dijo que ese tipo de cursos no tienen éxito, que a nadie le gusta remover la "mierda", siento la palabreja, pero fue así de clara y así de claro lo escribo.
Me preocupa que no queramos remover, porque si no sacamos todo aquello que tenemos dentro, se enquistará y todavía será peor.
A la gran mayoría nos han educado bajo la teoría de la tapadera, el nombre es mío, pero queda bien claro. Mejor no hablar de determinados temas, porque al hacerlo se puede llegar a sufrir, se puede llorar, se puede uno poner triste, pues bien, ¿por qué no podemos estar tristes, por qué no podemos expresar como nos sentimos por algo en concreto? ¿es mejor taparlo, tal vez así no nos hará daño? grave error y error que seguimos cometiendo la gran mayoría.
Sigo opinando, defendiendo y siempre defenderé que es mejor que la "mierda" esté en su sitio y este no es precisamente el wc.
Quizás la primera vez que la escuché el mensaje me pareció fácil de conseguir, quizás fue hace unos cuantos años...Ahora lo escucho y pienso, sí es cierto, no te preocupes más de la cuenta por las cosas que te pasan y que pasan a tu alrededor, pero seamos sinceros, la cosa es preocupante.
Para combatir todo esto, no paran de bombardearnos con mensajes tipo: monta tu propia empresa, saca el genio que hay en ti, etc. de repente parece que todos debemos ser emprendedores, creativos...vivimos en la era de la creatividad y el emprendimiento y es que en algo debemos ocupar nuestras mentes pensantes y creativas, por supuesto.
Debo reconocer que el coaching me enganchó bastante al principio,lo sigo y lo respeto, pero está claro que hay mucho intrusismo y muchos/as aprovechan ahora esta época para hacerte creer que te van a dar la clave del éxito, cuando en realidad esa clave la tienes tu.
¿Cuál es el problema? que no sabemos y no queremos mirar en nuestro interior, que hemos vivido durante mucho tiempo a remolque de la sociedad del consumo, la sociedad capitalista y comprando un jersey y unos zapatos nos sentíamos bien, y de nuevo lunes y de vuelta al trabajo, sin darle en muchas ocasiones importancia a aquello que estábamos haciendo; señores/as, el trabajo ocupa la mayor parte de nuestro día a día, si no disfrutamos con él o almenos de él...¿qué sentido tiene la vida?
Y ¿qué sentido tiene no preocuparnos en cómo estamos por dentro? si estamos bien por dentro quizás nos conformemos con un simple par de zapatos, quizás con ese par nos sintamos la persona más feliz del mundo.
Hace unos días contacté con un centro cívico ofreciendo actividades y talleres para motivar, para ayudar a personas a mejorar su autoestima, etc. mi sorpresa fue que la responsable del centro me dijo que ese tipo de cursos no tienen éxito, que a nadie le gusta remover la "mierda", siento la palabreja, pero fue así de clara y así de claro lo escribo.
Me preocupa que no queramos remover, porque si no sacamos todo aquello que tenemos dentro, se enquistará y todavía será peor.
A la gran mayoría nos han educado bajo la teoría de la tapadera, el nombre es mío, pero queda bien claro. Mejor no hablar de determinados temas, porque al hacerlo se puede llegar a sufrir, se puede llorar, se puede uno poner triste, pues bien, ¿por qué no podemos estar tristes, por qué no podemos expresar como nos sentimos por algo en concreto? ¿es mejor taparlo, tal vez así no nos hará daño? grave error y error que seguimos cometiendo la gran mayoría.
Sigo opinando, defendiendo y siempre defenderé que es mejor que la "mierda" esté en su sitio y este no es precisamente el wc.
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