domingo, 22 de diciembre de 2013

Esencia...

 
 
 


Pues sí, ¿por qué ser normal? ¿qué es ser normal?
Cuantas veces he escuchado la frase: soy o me considero una persona normal o él/ella es una persona normal, cuantas veces he preguntado ¿qué es para ti ser normal? y cuantas veces no he recibido respuesta y he añadido, lo que para ti es normal quizás no lo es para otros...

Simplemente sé tu mismo/a, no pierdas tu esencia, no pierdas aquello que te caracteriza, no cambies aquello que no quieras cambiar, si cambias hazlo por ti, no por los demás, sé tu, vive tu, vive tu vida, no vivas a través de los demás y sobretodo que nada ni nadie se permita el lujo de intentar cambiar o nublar, esa, tu esencia, algo tan especial como lo que te hace único/a.

Entre tanta felicitación navideña, esta es mi reflexión para estos días y, ¿quién sabe?, quizás este puede ser un propósito para el 2014.

miércoles, 11 de diciembre de 2013

En busca de la felicidad...

Como bien dice una gran amiga, somos la generación de las emociones, o por lo menos esa es también mi opinión, una generación, que en la mayoría de los casos valora los placeres de la vida, el goce, disfrute, el estar rodeados de amigos... Una generación perdida sí, pero muy emotiva.

A la mayoría, no nos dejaron expresar nuestras emociones de niños, nos decían cosas como:
  • No llores,  eso es de niños pequeños, lloras, luego eres débil, no deben verte llorar; 
  • No està bien enfadarse y sentir rabia, no muestres eso en público;
  • Si te ofrecen algo di que no.
¿Por qué? ¿por qué no llorar igual que reír? ¿por qué no enfadarse cuando toca hacerlo?, ¿por qué tanto pensar en el que dirán? si al final dicen igualmente...

  • No hagas esto que puedes caerte, pues ¿porqué no? me caígo, quiero y debo sentir miedo, porque si no nunca seré capaz de enfrentarme a mis miedos, porque si caígo cojo impulso y me levanto con más fuerza.

En ocasiones sobreprotegidos y también limitados. Incluso muchas veces sin poder llamar a las cosas por su nombre.

Y lo mejor de todo, buscando la felicidad incansablemente, pensando que la felicidad una vez se consigue es eterna y dura siempre. Hasta que al final descubres que la felicidad sí, existe, pero eres feliz en determinados momentos de tu vida, de tu día a día, no eternamente. Al principio cuesta asumirlo, pero al final aprendes a disfrutar de esos momentos y cuando llegan los malos, que también forman parte de la vida, te sientes mejor y con más fuerza y lloras cuando tienes ganas de llorar y aunque estes triste te ríes, porque a pesar de las desgracias, dentro de ti existe esa felicidad tan buscada, que aunque a veces tarde, siempre llega.






miércoles, 4 de diciembre de 2013

Trabajar y ser feliz

Trabajo, ¿quién lo inventó? Solemos asociar la palabra trabajo a madrugar, a estar toda la semana estresados, en ocasiones de mal humor, haciendo algo que no nos gusta...
Sí, por desgracia la mayoría la asociamos a todas estas cosas tan poco agradables.
¿Has pensado alguna vez en cambiar el significado de la palabra?

En los tiempos que corren es muy frecuente escuchar  peguntas del tipo:
  • ¿De qué puedo buscar trabajo?
  • ¿Qué puedo estudiar?
  • ¿Qué tiene más salida?

Uf! preguntas de respuesta complicada, aunque sencilla a la vez, tan sencilla como buscar en tu interior y hacer aquello que te haga feliz, aquello que hagas y te suponga, sí, un esfuerzo, pero un esfuerzo agradable, un esfuerzo con el que llegas a casa y te sientes igual o mejor que cuando saliste por la puerta a las siete de la mañana.

Cada vez más, encontramos a personas que se unen a esta tendencia, a hacer aquello que les hace felices.

Solemos trabajar por dinero, porque seamos realistas, el dinero es necesario para sobrevivir, pero si ahora tienes un trabajo al que odías acudir a diario, ¿a qué esperas? quizás te lo puedes tomar como algo transitorio e invertir tiempo en algo que te guste, que quién sabe, tal vez algun día puede llegar a ser tu propio negocio.





Hemos pensado demasiado en ganar dinero para poder tener un mayor poder adquisitivo, pero quizás, la clave de la felicidad no esté ahí.

Puede sonar raro hablar de esto en tiempos de crisis, en momentos en los que el dinero es para muchos muy importante, pero hay que mirar el lado positivo, gracias a ello los valores de muchas personas están cambiando.

Al fin y al cabo es tan sencillo como aprovechar el momento y cumplir tus sueños, o por lo menos saber que lo has intentado!





miércoles, 27 de noviembre de 2013

Alegre o triste, sonríe

  
 
 
 
Buscando alegría, hoy he encontrado esto, ha llamado mi atención sin duda, porque es cierto, hoy en día lo conformista es lo contrario de estar alegre, es decir, estar triste.

Hay que estar alegre, no por obligación, si no porque no debes dejar que todo lo que pasa a tu alrededor rompa con tu alegría y con tu calma interior.

Quizás estás pasando por un mal momento y en este momento te cuesta estar alegre, totalmente respetable, toca estar triste y debes dejar que esa emoción te invada, pero que no se quede, que se vaya.
Busca algun momento para sonreír, fíjate en alguien que te haga sonreír, lee, escucha una canción que te levante el ánimo, baila, habla con aquella persona que sabe como hacerte reír. Todos tenemos una especie de angel de la guarda, alguien que sabe como sacarnos una sonrisa porque de alguna u otra manera, hemos conectado, no tiene porque ser tu pareja, quizás ni sea tu mejor amigo/a...sea quien sea déjate contagiar.






jueves, 21 de noviembre de 2013

Música, el ritmo de la vida

De niña me encantaba encerrarme en mi habitación y coger los vinilos de mi hermana, aquellos que incluían las letras de todas las canciones. No paraba de cantar y cantar, daba lo mismo si la letra era en inglés o en español, creo incluso que en aquella época mi pronunciación de inglés era mejor que ahora, lógico, horas y horas de lectura de canciones de U2, Dire Straits, Spandau Ballet, Madonna, Queen... bandas sonoras tipo Dirty dancing, Pretty Woman...
Era feliz, tremendamente feliz, ese momento era para mi mi momento, ese y cuando me plantaba delante del televisor de casa y pulsaba el "play" del vídeo para ver Flashdance. No me cansaba de bailar y repetir una y otra vez el salto del baile final.

Quizás mis inicios en la música, fueron las cintas que escuchaba en el ford fiesta rojo de mis padres, en aquellos largos viajes a la playa o al pueblo, viajes que parecían largos y que ahora se hacen cortos.

En la escuela, recuerdo uno de mis primeros bailes de fin de curso, la canción hablaba de las estaciones del año, que por aquella época eran cuatro. Más tarde Alex y Cristina me hicieron inventar una coreografía.

Después llegaron las noches de baile con mis amigos/as, inolvidables noches, llenas de risas, lágrimas a veces, porque somos y éramos superemocionales, estábamos llenos de vida y aún lo estamos.

Ahora, la música me despierta por las mañanas y si puedo, me acompaña durante el día.
La música acompaña nuestras vidas y el ritmo de la mía debe estar acompañado de música. Si estoy triste me alegra, si estoy alegre me acompaña, me hace sentir emociones y cuando escucho algunas canciones que antes ya había escuchado, me invaden recuerdos, siempre buenos recuerdos y las mismas emociones sentidas. Un gran poder que tiene la música.


"En la música todos los sentimientos vuelven a su estado puro y el mundo no es sino música hecha realidad" (Schopenhauer)





martes, 19 de noviembre de 2013

Cambiar al resto

Seguro que alguna vez os habéis empeñado en cambiar a alguien, en cambiar algun rasgo de alguien que estaba a vuestro lado, pareja, hermano/a, padre o madre, hijo/a...¿Cuál es el motivo? ¿Por qué en ocasiones no somos capaces de aceptar a los demás tal y como son?

Suele suceder sobretodo con el enamoramiento, nos enamoramos y durante la primera etapa todo nos parece perfecto, cualquier cosa que haga el ser amado nos parece maravillosa. De repente, un día lo vemos con los mismos ojos, pero desde otra perspectiva, empezamos a darnos cuenta de que esa persona no es tan perfecta como nos habíamos imaginado, lógico, nadie es perfecto y quién pretenda serlo y lo consiga, que me lo explique.

Amar es querer a la otra persona tal y como es, con su esencia y no debemos olvidarnos de que es de esa persona de la que nos hemos enamorado, entonces, nos gusta como es, de no ser así, quizás es que no estamos tan enamorados/as.

Si quieres cambiar a alguien pregúntale almenos a esa persona si quiere cambiar, si quiere modificar ese rasgo de su personalidad que a ti por uno u otro motivo te molesta. Si esa persona no desea cambiar y es feliz tal cual, difícilmente verás un cambio en él o ella.

Volvemos a hablar de la aceptación, tan importante durante toda nuestra vida. Igual que te aceptas a ti mismo con tus defectos y tus virtudes, debes aceptar a los demás, puedes cambiar las cosas que de ti mismo no te gusten, pero las de los demás, son su responsabilidad.

Si quieres cambiar a alguien empieza por cambiar tu mismo, quizás no hayas elegido bien a la/las personas que tienes a tu lado. Los demás son como son y eres tu quién puede o no aceptar/los.

La sinceridad ante todo, contigo y con los demás, otra de las claves de la felicidad.

 
 
 


domingo, 17 de noviembre de 2013

Aceptar, avanzar

Para seguir hay que aceptar, aceptar nuestro pasado, en el cual en ocasiones vivimos anclados.  Muchas veces hay pérdidas y conflictos en él sin resolver.
Sin aceptación difícilmente podremos seguir adelante, avanzar y crecer en todos los aspectos de nuestra vida.
Aceptación no debe confundirse con conformismo, nada tiene que ver y en muchas ocasiones se confunde.
 
Aceptar permite también elaborar pérdidas que hemos tenido y no hemos podido resolver, ya que a la mayoría de nosotros nos resulta difícil perder, perder a seres queridos, perder el trabajo...Nos guste o no, la pérdida forma parte de la vida y eso es quizás lo primero que debemos aceptar.
Para conseguir algo, hay que perder  y es sin duda esa falta la que nos mueve, la que nos hace desear lograr nuevos retos.
 
Aceptando, incluso conseguiremos estar en paz con nosotros mismos, reconciliarnos con nuestro pasado, aprovechando oportunidades ahora en el presente.
 
La aceptación también ayuda a hacer cambios en nuestra vida, de lo contrario todo seguirá igual y viviremos inmersos en la queja. 

Un consejo: aprende a valorar lo que tienes y acepta la falta, viéndola como una oportunidad, como un motor para seguir, para cambiar aquello que deseas y para conseguir tus metas y objetivos.

Tenemos tantas cosas por descubrir y  ofrecer al mundo...
 
 
 
 
 
 

sábado, 16 de noviembre de 2013

Fin de semana lluvioso

Este fin de semana el tiempo ha acertado, lluvías y más lluvías, necesarías ya, porque la tierra está seca.

Es increíble como nos condiciona el tiempo, lógico por un lado, pero por otro exagerado, en algunos países viven diariamente acompañados de agua, pero la vida sigue. Es cierto, es más peligroso salir con lluvía, conducir con lluvía y si te mojas corres el riesgo de sufrir un catarro, pero la vida sigue.

No podrás disfrutar de un paseo por la montaña o de una comida a la luz del sol, pero podrás mirar el paisaje mojado, la lluvia caer, desde el salón de tu casa, desde algún lado en el que estes relajado y observando que todo tiene su encanto y que sin lluvia, no podríamos disfrutar del paisaje que disfrutamos.
 
¡Feliz fin de semana lluvioso!
 
 

miércoles, 13 de noviembre de 2013

La historia se repite

Sí, la historia se repite...¿Alguna vez os habéis parado a pensar en qué una y otra vez en nuestras vidas se repiten las historias?

Somos animales de costumbres, hábitos adquiridos con el paso de los años, en ocasiones buenos, en ocasiones malos, caemos y tropezamos, nos levantamos pero de nuevo volvemos a caer y así sucesivamente. Llo mejor, que nos levantamos, pero sin ser conscientes nos pasa lo mismo una y otra vez.

Solución, pararse y pensar, remover la historia, todas tus historias, encontrar la causa, el porqué de esas repeticiones, el porqué de ese círculo del cual no es posible salir. No es fácil enfrentarse a ello, pero sí será fácil tu vida si lo sacas todo fuera, si resuelves tus problemas, las historias que se repiten y que ojalá no se repitieran.
Debes ser fuerte y lo eres, más fuerte de lo que piensas, todos somos fuertes, porque somos personas y las personas por naturaleza somos fuertes.

Este mundo no es fácil y de no ser fuertes hubiéramos creado otro mundo, un mundo imaginario, un mundo irreal...








martes, 12 de noviembre de 2013

Vence al miedo

Todos tenemos miedos, sobretodo en situaciones en las cuales tenemos que dar lo mejor de nosotros, como por ejemplo en la presentación de un proyecto al que le has dedicado horas, en un acto social en el cual debes dar un discurso, en una entrevista de trabajo y un largo etcétera.  Hay muchísimas situaciones de nuestra vida en las que nos asustamos, nos bloqueamos e incluso nos paralizamos. Tenemos miedo a salir de nuestra zona de confort, esa zona en la que nos sentimos seguros, esa zona en la que todo lo que hacemos es algo que dominamos y sabemos que de una u otra forma haremos bien.
Hace unos días en el post de "Sí al cambio, adiós miedos", ya os hablaba sobre este tema, sobre porqué nos sentimos cómodos y seguros haciendo siempre lo mismo, aunque esa comodidad no nos ayude a crecer personal y profesionalmente.
Hay personas que no tienen el deseo de cambiar, otras en cambio sí, pero de una u otra manera, todos deseamos hacer cambios en nuestra vida, a veces voluntariamente, otras obligatoriamente. Sea como sea, la clave es vencer ese miedo y enfrentarse a él.

Durante mis años de experiencia profesional como orientadora laboral, acompañé y asesoré a muchísimas personas en la búsqueda de empleo, dábamos un gran apoyo emocional a esas personas y se establecía un vínculo de confianza, finalmente la persona hablaba también de sus miedos.
Siempre recordaré y pongo en práctica en ocasiones, un consejo que les daba y que me emocionaba saber que aplicaban y les funcionaba. El consejo es el siguiente:

"Si te encuentras ante una situación que te provoca miedo, nerviosismo...cierra los ojos durante unos segundos y visualiza algun momento de tu vida, alguna actividad que hagas en la que te sientas bien, en la que te sientas el/la mejor".
Les ponía ejemplos tipo: hacer un pastel de chocolate exquisito, bailar el tango como un/a profesional, etc. Cada cual pensaba el suyo y al hacerlo les veía sonreír, el pensar en esa situación les hacía felices.
La cuestión es que si piensas en ese momento, en esa actividad en la que te desenvuelves muy bien, te estás alimentando de energía positiva y te sientes bien por dentro y te ves bien por fuera. Serás capaz de cualquier cosa que te propongas.
Os animo a probar este pequeño truco, que aunque pequeño es muy grande y funciona.

Más adelante volveremos a hablar de la famosa zona de confort. Hoy os dejo pensando y visualizando ese momento feliz de vuestra vida. Si dedicáis unos minutos a pensarlo y os relajáis, notaréis incluso la famosa sensación de mariposas en el estómago. Otro más de los síntomas de la felicidad.






 
 
 

lunes, 11 de noviembre de 2013

No dejes de sorprenderte

Siempre he preferido a las personas transparentes, aquellas que dicen lo que piensan, aquellas que dicen lo que sienten. A pesar de todo, ese tipo de personas a veces te sorprenden, todo tipo de persona sorprende.

Estos días me han explicado algo que jamás me hubiera imaginado y es que las personas tenemos una gran capacidad para ocultar nuestra realidad.
Por eso, tras años de experiencia y de trabajar con personas, no dejo de sorprenderme, porque somos sorprendentes, para lo bueno y para lo malo, porque tenemos un gran poder sobre nosotros y sobre los que nos rodean, pero mejor utilizarlo bien, en beneficio de los demás, en definitiva en el nuestro propio.

Cuantas verdades se ocultan detrás de nuestras puertas, realidades que a veces entristecen, que en ocasiones nos hacen felices. Alegres o tristes hay que seguir, hay que reír, hay que llorar, dejar que fluyan las emociones y los pensamientos, porque eso es sano. Es sano sentir la alegría, sano sentir la pena. Preocuparte por los demás y ofrecerles tu ayuda es totalmente lógico, almenos esa es mi opinión y es lo que me enseñaron y me alegro de que así lo hicieran.

Hay personas que no tienen empatía, que no son capaces de ponerse en la piel de los demás, pero mi experiencia me ha demostrado que la mayoría sí lo hacen, que a pesar de que vivimos en una sociedad consumista, aunque cada vez menos por las circunstancias, y con tendencia egoísta, me doy cuenta de que todavía muchos/as siguen conservando ese tipo de valores, respeto, ayuda...
Me alegro de cruzarme con personas así.

No dejes que los problemas de los demás te impregnen, pero ofréceles tu ayuda si realmente lo deseas, sin esperar nada a cambio, desinteresadamente.

Después de esto me vuelvo a dar cuenta de que la vida es una sorpresa constante y que así siga, porque sin sorpresa no hay emoción y las emociones son el motor de nuestras vidas.

¡No dejes de sorprenderte, ilusiónate y descubre cada día algo nuevo!


jueves, 7 de noviembre de 2013

A dormir feliz

Me voy a dormir feliz, feliz por varios motivos, el primero, porque he descubierto que ayer recibí sesenta visitas en este, mi blog, quizás sea sólo curiosidad, tal vez pasen, vean y no se queden, pero para mí eso ya es suficiente. Hacer algo que sientes y te gusta y ver que interesa al resto de la humanidad...

La humanidad está triste, la humanidad necesita desconectar, necesita reír y no pensar en nada, dejar la mente en blanco de vez en cuando.
La situación es preocupante y pequeñas cosas, como está, para mí son importantes.

Quizás hemos necesitado tocar fondo para volver a valorar los pequeños detalles, detalles que no por ser pequeños dejan de ser importantes.

Me dejo el resto de los motivos, pero hoy con este es suficiente.



 

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Sí al cambio, adiós miedos

Todos los días la misma rutina, el despertador suena a la misma hora, desayunas lo mismo de siempre, te vistes con los colores de siempre...¿ Has pensado alguna vez que si cambias algo, sólo una de estas cosas, puedes conseguir sentirte más vivo/a?

Uno de los motivos por los que solemos caer en la rutina es por el miedo, sí el miedo, esa emoción que nos gusta muy poco, pero que es necesaria, porque nos alerta en algunos momentos de nuestra vida y de no ser por él... ups! peligro.

A veces el miedo es infundado y es entonces cuando empiezan los problemas, te bloqueas y pierdes oportunidades, dejas de hacer cosas que deseas, pero que debido a tus miedos, crees que serás incapaz de hacer.

Curiosamente, según estadísticas, el segundo miedo más común es el de hablar en público, un miedo que personalmente, conseguí superar hace algún tiempo, ¿el secreto? el mismo que el de todo ser viviente, me enfrenté a él. El miedo empequeñece si te enfrentas a él.

Una vez superas alguno de tus miedos, te sientes capaz de superar otros, esto te ayuda a ganar seguridad en ti mismo/a, de hecho, las personas más seguras de si mismas, con una buena autoestima, suelen tener menos miedos.
Sobretodo, hay algo que no debes olvidar y es que puedes hacer todo aquello que te propongas.

Es muy importante también tener un pensamiento positivo, dejar atrás los pensamientos negativos y limitantes, que lo único que hacen es frenarte. Evita también los comentarios negativos de otras personas, las palabras son muy importantes y aunque a veces pensemos que no nos afectan, sí lo hacen. Aprende a filtrar los mensajes de los demás y quédate únicamente con aquello que te haga sentir bien y que se corresponda con la realidad.

Un consejo, mañana, intenta cambiar algo, no te pongas ese jersey gris, ponte uno rojo, no desayunes café y tostadas, date un capricho y cómete un dulce...todo empieza por pequeños cambios, pequeños cambios que te ayudan a hacer grandes cambios, cambios que te hagan más feliz, que te hagan sentir mejor.

¡Haz que tus miedos te dejen disfrutar! 




miércoles, 30 de octubre de 2013

Llega la noche, vampiros emocionales

Hoy, mientras escuchaba un programa de radio en el que hablaban sobre las relaciones que absorben energía, sobre los famosos vampiros emocionales, que no muerden pero su daño es a veces mayor que el de un mordisco, me daba cuenta de que estamos rodeados de ellos y de que todos/as, en alguna o otra ocasión, hemos sido vampiros emocionales.

A nadie le gusta reconocer que ha hecho daño, que en alguna ocasión ha absorbido la energía positiva de otra persona, en cambio, nos encanta decir que hemos salvado a alguien, socialmente está mejor visto, pero sea como sea, unos y otros nos alimentamos enérgicamente.

Las claves para no dejarse morder por esos vampiros emocionales: poner límites, desarrollar la empatía... estas son algunas, pero existen muchas más. Lo importante es detectarlos, saber que son personas que cuando se van te dejan agotados, personas capaces de desmontar toda tu realidad feliz.
Si te paras a pensarlo incluso da miedo, imagínate a alguien que chupa hasta la última gota de tu sangre y te deja sin fuerza, sin nada dentro. Por supuesto, puedes impedirlo,  tu eres responsable de no seguir ese patrón de relación en la que, tanto tu como el vampiro obtenéis beneficios, es un intercambio, tu me das energía y yo te hago sentir bien, porque te necesito, porque me salvas de lo desgraciado/a que soy. Uf! que relaciones tan poco saludables y destructivas.

Si te identificas y te encuentras en alguno de estos roles, a qué esperas, cambia tu conducta, debes indagar en tu interior, conocerte mucho mejor para poder saber el motivo por el cual te comportas así, una vez lo sepas podrás ponerle remedio, no es tan difícil, sólo requiere de ganas y tiempo.

Cuando consigas hacer esto quizás pierdas algunas relaciones de amistad, e incluso de pareja, pero como siempre piensa en positivo, esas relaciones no te beneficiaban, esas relaciones te agotaban y tu energía es muy necesaria para vivir la vida, para aconseguir tus objetivos, tus sueños, para amar a aquellos que verdaderamente te aman, aquellos que sólo quieren verte feliz, a los que les alegran tus logros, les alegra tu alegría, tus ilusiones y por supuesto nunca te piden nada a cambio, se conforman con verte simplemente feliz :D


martes, 29 de octubre de 2013

¿Llegó el otoño?

Llueve, hace un día gris, extraño después de haber pasado ayer un gran día de sol y calor.

Es gracioso escuchar a los abuelos/as hablar del tiempo, siempre hablan de él, de como está cambiando, de lo extraño que es vestir en manga corta en el mes de octubre, extraño o no, a mi me encanta.

Hay que reconocer que todas las estaciones tienen su encanto, la caída de las hojas en otoño hace de los paisajes de montaña algo espectacular, pero siempre se ha dicho y es real, que el sol da vida, que el sol te llena de energía, es cierto que a veces agota, pero la luz solar permite hacer una y mil cosas.

Este verano disfruté de un maravilloso tiempo en un país nórdico, un tiempo inimaginable, unos paisajes increíbles a la luz del sol, fueron pocos los días nublados, pero debo reconocer que incluso así, los paisajes eran espectaculares.  

Ahora, allí deben quedar pocas horas de luz, así que aunque hoy esté nublado...



¡Que suerte tenemos de poder disfrutar del día!

lunes, 28 de octubre de 2013

Lunes, la semana empieza bien


Te despiertas, levantas, abres los ojos y te das cuenta del maravilloso día que te espera por delante. ¿Habéis empezado ya vuestro cuaderno positivo? Si lo leéis cada mañana el día empezará con buen pie.

Todos los días de la semana pueden ser duros, pero el lunes es el día por excelencia, lo sea o no, cada lunes nos bombardean con esa etiqueta; quizás otra manera de verlo sería despertar lleno de alegría y vitalidad, pensando en lo gratificante que ha sido el fin de semana, o como a veces he leído, pensar en la frase: si no existieran los lunes no llegarían los viernes.
Sea como sea, la semana tiene siete días y normalmente se descansan dos, algunos sólo uno y otros, ocasionalmente, ninguno. Sea como sea lo ideal es saber valorar los buenos momentos.
Muchos con el paso de los años, se dan cuenta de que al fin y al cabo el trabajo nos puede gustar más o menos, pero es trabajo.
Algunos han elegido bien y disfrutan con lo que hacen, otros no tanto...

!Ahí está el fin de semana para hacerlo!

jueves, 24 de octubre de 2013

Días felices

No sé por qué extraño fenómeno, pero hay días en los que te sientes tremendamente feliz, días a los que he bautizado, simplemente, como días felices.

 ¿No os pasa? hay días en que despiertas y todo parece maravilloso, de color de rosa sería para las/os enamoradas/os del rosa, aunque yo prefiero decir que el color es verde.

Caminas y todo lo que ves te encanta, todo capta tu atención, ves sonrisas en la gente, ese día ves lo bonito que es el mundo y si ves algo que no te gusta, simplemente sientes la emoción que te transmite y la dejas escapar, como si fueras de nuevo un niño/a. Que sabios/as que son los niños/as!

Creo, es mi hipótesis, que esos días estás más receptivo/a con los cinco sentidos puestos en todo, sin olvidarte de ninguno, ese día disfrutas de lo que te gusta, del olor de las flores del parque, del sabor del Cola Cao de la mañana, de la música que suena en la radio...sin duda ese día es un día feliz. Feliz porque te sientes plena/o, porque te apetece sonreír, estar con las personas a las que amas, disfrutar de tu tiempo libre y además ese día estás tremendamente relajado/a.

¿No sería maravilloso tener muchos días felizmente verdes? quizás la clave está en ti, si miras alrededor y ves todo lo que tienes y disfrutas de ello, te olvidarás de aquello que no está y dejarás de pensar en el mañana disfrutando del presente.

La clave sin duda es relajarte y disfrutar.

Os deseo muchos días intensamente verdes ;D


miércoles, 23 de octubre de 2013

Párate de vez en cuando

Que difícil es parar, que complicado, algo que parece tan sencillo es a veces imposible.

Recuerdo cuando trabajaba en Barcelona y cada mañana cogía el metro, a veces me sorprendía diciéndome a mi misma: ¿por qué corres, vas bien de tiempo?; que porqué corría, porque todo el mundo a mi alrededor lo hacía.
Nunca he sido muy puntual, defecto que intento corregir pero por más que lo intento no consigo hacerlo, incluso en ocasiones me espero al último momento para salir de casa, como si algo dentro de mi me dijera, venga que así ahora corremos... Estoy segura de que muchos/as os sentís identificados y que  muchos/as habéis intentado corregirlo en alguna que otra ocasión.

A veces corremos para no pensar, a veces corremos para no ver, o simplemente porque nos gusta esa sensación, porque así nos sentimos vivos/as.

Un pequeño y a la vez gran consejo: párate de vez en cuando, respira, piensa en como te sientes, piensa en como está tu cuerpo, que se mueve por dentro. Si lo haces puedes llegar a descubrir tantas cosas, lo primero y más evidente, por ejemplo, el color de las flores del parque por el que pasas todas las mañanas.

Otro ejemplo más de que nos perdemos detalles, y igual que detalles nos perdemos momentos.

Todo esto me recuerda a un capítulo del Alquimista (Paulo Coelho), libro que me regalaron en el momento preciso, cosas que sin saber cómo ni porqué, pasan a veces y son perfectas. Pues bien, en el capítulo se habla de la importancia de observar las maravillas del mundo, sin olvidar lo esencial, pero por supuesto disfrutar de todo lo que nos rodea. Sin duda, otro más de los secretos de la felicidad!

martes, 22 de octubre de 2013

Recomendaciones en positivo

Creo que en alguna ocasión ya os he hablado de esto, algo que escuché en una entrevista a Elsa Punset, y como dijo uno de los formadores de las jornadas de comunicación emocional, sé que si lo ha dicho ella resultará más atractivo. De todas formas ahora os lo recomiendo yo y por supuesto pongo mi granito de arena, granito de arena que aporto tras mi experiencia, porque si algo bueno tienen los consejos, es que cuando los aplicamos tenemos la gran oportunidad de experimentarlos y aportar nuevas ideas, basándonos por supuesto en nuestra percepción y experiencia.

Pues bien, sin más os recomiendo que, primero os compréis un cuaderno, yo lo he titulado mi cuaderno positivo y en él escribo todo aquello bueno que me pasa durante el día, intento por lo menos escribir cinco cosas diariamente; también lo uso para escribir observaciones sobre los demás y sobre mi misma, cosas de mi que voy descubriendo poco a poco, porque sí, a pesar de mis treinta y seis años, todavía no me conozco del todo.

Mi cuaderno positivo se está quedando sin páginas en blanco, no pensé que lo llenaría tan rápido.

Hacer la prueba y al final del día leer todo aquello que habéis escrito, os iréis a dormir con una buena sensación y a la mañana siguiente os despertaréis pensando que sólo por esas cosas merece la pena disfrutar de otro día. Es imposible saber lo que nos depara cada uno de los días de nuestra vida, pero si te despiertas positivamente, incluso el sonido de tu despertador sonará a una dulce melodía, incluso disfrutarás de una gran o pequeña conversación al llevar a tus hijos a la escuela, simplemente te sentirás más alegre, positivo/a y todo lo que te depare el día pasará por un filtro diferente, no por el oscuro filtro de la negatividad, que en muchas ocasiones se respira en el ambiente. Si consigues huir de esa negatividad y no dejarte llevar por las ansías de correr y vivir deprisa, estoy segura de que conseguirás tener más momentos de felicidad, porque no nos engañemos la felicidad plena no existe, pero si existen momentos en los que te sientes la persona más feliz del mundo y esos momentos son suficientes para aportar energía, ilusión y ganas de seguir disfrutando de la vida!



El valor de los pequeños momentos

Detalles, detalles que se nos pasan, porque no vivimos el presente, porque siempre pensamos en mañana, en el mes o el año que viene. Con lo sencillo que es vivir el momento, pero resulta que a nosotros los humanos nos resulta más sencillo olvidar el presente y vivir anclados en el pasado o proyectar nuestro futuro.

Últimamente están muy de moda técnicas como el mindfulness (aquí y ahora), un tipo de meditación cuyo propósito es enseñarnos a estar presentes en lo que estamos viviendo en un justo momento. En la técnica se hacen prácticas como por ejemplo la alimentación, que consiste en disfrutar, saborear y pensar como ha llegado un alimento a nuestras manos, valorar incluso el trabajo realizado para poder disfrutar de ese alimento; otro ejemplo sería el caminar, sentir nuestros pasos al pisar el suelo e incluso ser capaces de acelerar o frenar el ritmo, algo que para mi al practicarlo fue complicado. Que manía tenemos de ir corriendo siempre, otro mal hábito que hemos adquirido, hábitos que al fin y al cabo sólo nos conducen a sufrir estrés y algun que otro problemilla de salud.

Esta y otro tipo de técnicas, son técnicas que admiro y que me parecen fantásticas, son una manera de reeducar a la especie humana, una especie que ha perdido valores simples, pero sin duda muy importantes.


 




 
.

lunes, 14 de octubre de 2013

Trabajo, felicidad y otras cosas

Últimamente no paro de escuchar en la radio"Don't worry be happy", antigua canción, cuyo mensaje es bastante claro.
Quizás la primera vez que la escuché el mensaje me pareció fácil de conseguir, quizás fue hace unos cuantos años...Ahora lo escucho y pienso, sí es cierto, no te preocupes más de la cuenta por las cosas que te pasan y que pasan a tu alrededor, pero seamos sinceros, la cosa es preocupante.

Para combatir todo esto, no paran de bombardearnos con mensajes tipo: monta tu propia empresa, saca el genio que hay en ti, etc. de repente parece que todos debemos ser emprendedores, creativos...vivimos en la era de la creatividad y el emprendimiento y es que en algo debemos ocupar nuestras mentes pensantes y creativas, por supuesto.

Debo reconocer que el coaching me enganchó bastante al principio,lo sigo y lo respeto, pero está claro que hay mucho intrusismo y muchos/as aprovechan ahora esta época para hacerte creer que te van a dar la clave del éxito, cuando en realidad esa clave la tienes tu.

¿Cuál es el problema? que no sabemos y no queremos mirar en nuestro interior, que hemos vivido durante mucho tiempo a remolque de la sociedad del consumo, la sociedad capitalista y comprando un jersey y unos zapatos nos sentíamos bien, y de nuevo lunes y de vuelta al trabajo, sin darle en muchas ocasiones importancia a aquello que estábamos haciendo; señores/as, el trabajo ocupa la mayor parte de nuestro día a día, si no disfrutamos con él o almenos de él...¿qué sentido tiene la vida?

Y ¿qué sentido tiene no preocuparnos en cómo estamos por dentro? si estamos bien por dentro quizás nos conformemos con un simple par de zapatos, quizás con ese par nos sintamos la persona más feliz del mundo.

Hace unos días contacté con un centro cívico ofreciendo actividades y talleres para motivar, para ayudar a personas a mejorar su autoestima, etc. mi sorpresa fue que la responsable del centro me dijo que ese tipo de cursos no tienen éxito, que a nadie le gusta remover la "mierda", siento la palabreja, pero fue así de clara y así de claro lo escribo.

Me preocupa que no queramos remover, porque si no sacamos todo aquello que tenemos dentro, se enquistará y todavía será peor.

A la gran mayoría nos han educado bajo la teoría de la tapadera, el nombre es mío, pero queda bien claro. Mejor no hablar de determinados temas, porque al hacerlo se puede llegar a sufrir, se puede llorar, se puede uno poner triste, pues bien, ¿por qué no podemos estar tristes, por qué no podemos expresar como nos sentimos por algo en concreto? ¿es mejor taparlo, tal vez así no nos hará daño? grave error y error que seguimos cometiendo la gran mayoría.

Sigo opinando, defendiendo y siempre defenderé que es mejor que la "mierda" esté en su sitio y este no es precisamente el wc.